La acogida en Francia ha sido muy amistosa
Hemos conocido a Tan el 25 de octubre de 2012 durante la "Nuit des Etudiantes du Monde" (Noche de los Estudiantes del Mundo), un evento organizado por el Ayuntamiento de París en colaboración con la CIUP y el CROUS de París.
Ha aceptado hablarnos del programa Malasia gestionado desde hace diez años por Campus France, del cual es uno de los beneficiario, y de sus tres años de estudios en Francia.
¿Cómo se desarrolla este programa?
Todos los alumnos Malasios desean salir del país como parte de este programa; no hay duda entonces que la competencia es muy dura. Tuve la suerte de hacer parte de los beneficiarios e integrar la formación pre-Francia durante dos años en la Universidad de Kuala Lumpur.
He comenzado mis estudios en Francia en el 2009 en la IUT Sophia Antipolis de Niza. La acogida en Francia ha sido muy amistosa. Todo era bien organizado y pudimos apoyarnos completamente sobre la coordinadora del programa.
¿Donde estas estudiando ahora?
Estoy matriculado desde el principio de año académico en tercer año en la Polytech' París UPMC. Este año es muy especial: por primera vez experimento la autonomía. Aunque he beneficiado de un apoyo muy importante de la parte de Campus France para encontrar un alojamiento en la CIUP (Ciudad Internacional Universitaria de París), he realizado la mayoría de mis procedimientos por yo mismo... y estoy muy orgulloso! La CIUP realmente es el mejor sitio. Lo que prefiero es la mezcla cultural que se encuentra en las residencias, y particularmente la residencia Victor Lyon.
¿Por qué elegiste Francia?
Debo confesar que no era Francia mi primer elección, pero los EEUU. Hoy no me arrepiento por nada. Para mí, los aspectos más importantes son entre otros el aprendizaje del francés, la calidad de la educación, la riqueza de la vida cultural, la situación en el corazón de Europa, pero también los costes de matricula muy bajos.
¿Puedes contarnos un aspecto determinante de tu estadía en Francia?
Al principio, estaba un poco sorprendido ver tanta gente tocarse o besarse en público. Es inconcebible en la cultura de mi país. ¡Ahora, estoy completamente acostumbrado!